A partir del scanner 3D hecho en campo, modelamos el entorno donde se proyecta la obra. De esta manera la integración es más precisa y el modelo más acorde a la realidad.

Una vez en oficina, vamos generando el modelo conforme se ejecutará posteriormente, primero demoliciones si son necesarias, luego estructura y cubiertas, y finalmente envolventes. En este caso, el de elevación de la cubierta de unas naves, se da el caso de que no se realizará de una vez. Es necesario retranquear las cubiertas para en una fase posterior unirlas a un nuevo edificio proyectado.
Además, siendo que se modifican las cargas de una nave de mas de 40 años, antes de realizar el cálculo estructural se ha hecho una campaña de ensayos de ultrasonidos para conocer el estado del hormigón y poder dimensionar la nueva estructura de una manera acorde con la capacidad estructural de la nave. El resultado es espectacular.